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viernes, 30 de junio de 2017

Don Quijote de la Mancha

Primera parte

José María Torrent
(Ed. Hispano Americana, 1941)


Terminada la guerra incivil que asoló España durante tres largos años la "subcultura" popular comenzó a recuperar paso a paso el espacio que le correspondía, coartada y oprimida por las consignas, censuras, prohibiciones y persecuciones que se han explicado ya muchas veces y en las que no es preciso insistir. El material impreso se encontraba con el hándicap adicional de la dificultad de conseguir papel y permisos de publicación, lo que supuso un largo viacrucis de intentos por parte de los editores no "afectos" al nuevo régimen hasta poder ir accediendo a un mercado, por otra parte, escaso y empobrecido.
Hispano Americana fue una de las editoriales que arrostraron aquellos años oscuros acercando al quiosco páginas y páginas de historietas que forman parte de la memoria de las generaciones de la posguerra.
La adaptación de obras literarias o de biografías de prohombres de la hispanidad fue una de las medidas más habituales para evitar el choque con la administración. Hispano Americana no dejó de hacerlo. Entre las colecciones que dedicó a este tipo de publicaciones destacaron los cuadernos que los coleccionistas consideraron agrupados bajo la etiqueta Las Grandes Aventuras, en la que se publicaron seis números con episodios históricos y una versión en viñetas de la obra cumbre de Miguel de Cervantes.
El blog presenta hoy el cuaderno en el que José María Torrent adaptó a la historieta la primera parte de El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha. Se trata de una historieta sobrecargada de textos y diálogos y con una monótona diagramación que no facilita la lectura, pero tiene el encanto de la obra creada sin otra pretensión que llegar al lector y contar una historia. O al menos eso me parece a mí.










3 comentarios:

  1. Me encanta que hayas expuesto esta versión tebeística del Quijote, pues soy filólogo e investigador literario, con Cervantes entre mis temas predilectos.
    La verdad es que se trata de una versión sencilla pero llena de cierto atractivo, que recuerdo con mucho cariño.

    Un abrazo

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