LA MEMORIA FRÍVOLA

Galería de grandes historietistas españoles

Martínez Osete

Un trabajador infatigable

Entre los muchos dibujantes e historietistas que se han dado en España existe una categoría que podría equipararse a la que en la meca del cine correspondía a los que se llamó "artesanos", aquellos autores capaces de hacer frente a cualquier empresa, adaptarse a cualquier necesidad y cubrir cualquier hueco. Si tenemos que citar alguno de estos artistas españoles, hay varios que vienen inmediatamente a la mente de quienes leíamos tebeos en los años cincuenta y sesenta: Claudio Tinoco, Beaumont... y por encima de todos, Martínez, Martínez Osete, Osete... o cualquiera otra de las mil firmas de este autor. Y digo autor conscientemente, por cuanto Juan Alejandro Martínez Osete no se limitó a cubrir el expediente y trabajar a destajo (lo que sí hizo, evidentemente), sino que dejó su impronta en cuantas historietas dibujó, a pesar de estar constreñido muchas veces a tomar el relevo de otros creadores y rellenar página tras página de cualquier género, ya que Osete se desenvolvía con igual dominio en el campo humorístico y en el aventurero.
Hablaremos en otro momento de su trabajo para cumbres de nuestros tebeos de acción como Trueno o El Jabato o del curioso asunto de su versión de Superman con guión de Víctor Mora, en esta primera entrada limitaremos la revisión a sus trabajos iniciales, para revistas como Chicos o La Risa y algunas de sus colecciones de cuadernos de aventuras.
Los primeros trabajos de Osete que conozco aparecieron en Chicos, donde el dibujante coincidió con Emili Boix, autor al que volvería a encontrar más tarde en La Risa y del que tomó luego el relevo en varios personajes.
Aquí pueden verse algunas muestras de los primeros trabajos de Martínez (firma única que he podido encontrar en la revista de Consuelo Gil). Como curiosidad, una historieta de Niceforo que se repitió en los números 545 y 548 de la colección:

Historieta de Niceforo en el número 545 de Chicos.

La misma historieta en el número 548.

Historieta publicada en el número 542 de Chicos.

Segunda página del número 543.

Fue en La Risa, una revista que albergó a algunos destacados historietistas a mediados del siglo pasado: Rizo, Emili Boix, Raf, Ibáñez..., donde continuó Martínez Osete su carrera como dibujante todoterreno. El contenido de la revista de Editorial Marco constaba de chistes, historietas cómicas y relatos seriados de aventuras y romance, encargándose Osete generalmente de las historietas "serias", además de ocuparse de varios de los personajes humorísticos y dibujar alguna tira cómica. En cada número solían aparecer cuatro o cinco páginas con alguna de sus firmas. Con Ibáñez y Raf, y casi siempre con guiones de Carlos Bech, se había convertido en la columna vertebral de la revista. 

En los últimos tiempos de la publicación, Osete fue abandonando el humor y limitándose a incluir en la doble página central un episodio de alguno de los protagonistas de los cuadernos de aventuras que por entonces dibujaba para la editorial.

En La Risa fue moneda corriente que los personajes cambiaran de autor, y, como ya se ha dicho, Martínez Osete fue el encargado de tomar el relevo de Emili Boix en varias de las series de humor más características de la publicación: Nicrostato Mochales, Nicomedes Camueso, Bob Ayna y Pat Acón, los héroes del batallón... (los títulos de las series de La Risa no tenían nada que envidiar en cuanto a sonoridad a los mejores de Bruguera, como puede apreciarse).

Aquí están algunos ejemplos de la primera de las series citadas; tres de ellas las firmó Martínez, la otra, Osete:

Y cuatro historietas de Nicrostato Mochales y su amigo Napoleón, siempre entrando o saliendo del manicomio en el que pasaban sus días; también una de ellas lleva la firma Osete:

Ayné se hizo cargo de la serie más adelante, dibujando a un Nicrostato que poco se parecía al original de Boix:

Bob Ayna y Pat Acón, los desastrados representantes de la Infantería estadounidense en una indeterminada guerra que puede ser la de Corea, también pasaron de manos de Emili Boix a las de nuestro autor. En ocasiones aparecían en la doble página central impresa en bicolor:

También en los temas románticos se movió Osete con comodidad. Estas muestras pertenecen a los seriales La herencia de Lili y Muñequita y la historieta cómica Hogar dulce hogar. Esta última, con guión firmado por Carlos Bech, pasó también por las manos de Saló y de Raf.

En La Risa era común incluir alguna página con tiras cómicas de varios dibujantes. Adjunto una en la que aparecen dos historietas de Osete que el autor firmó, respectivamente, como Juan Martínez y Jean Martínez (pido excusas por el rasgón de la página). Las otras imágenes pertenecen a las series El mosquetero Rastaflán, Sidi-Omar y Pete Panoli (las dos últimas ocupaban sólo un cuarto de página cada una):

En el terreno de la aventura, Osete tampoco desentonaba. Algunas páginas de este tenor publicadas en La Risa pueden servir de muestra. Se trata de páginas sueltas, no he conseguido completar ningún relato. Eso sí, se incluye el final de la aventura de El Aventurero del Espacio.

Para terminar, un superhéroe andino nacido de la mano de Boixcar en 1946 que Martínez Osete resucitó seis años después: El Puma.

Un ejemplar del número 15 es el más antiguo que encontré. Lo incluyo como ejemplo del buen hacer de Martínez Osete.

Es de esperar que pueda encontrar muestras en mejores condiciones para seguir analizando y disfrutando en posteriores entradas la obra de este galeote del tebeo, don Juan Alejandro Martínez, OSETE.

[Desgraciadamente, sólo he tenido acceso para preparar esta entrada a unos pocos ejemplares de Chicos y una docena larga de números de La Risa (mis disculpas, todas las docenas son iguales, no las hay más o menos largas, ¡es que fueron trece tebeos!). Con eso y el recuerdo de mis lecturas infantiles me he atrevido, quizá demasiado osadamente, a afirmar algunas cosas sobre estas revistas que muy posiblemente estén equivocadas. Ruego comprensión, no soy un experto, un estudioso ni un divulgador, sólo un viejo aficionado que intenta hacer accesibles a otros amantes de los tebeos materiales que no son fáciles de compartir. Para más desconsuelo, el estado de los ejemplares es bastante lamentable, lo que he intentado arreglar lo mejor posible, espero que no quede demasiado mal.]