LA MEMORIA FRÍVOLA

Heroínas para las chicas yeyés

Mary "noticias"

De Roy Mark y Carmen Barbará

 

La llegada de la modernidad traída en los años sesenta por la televisión, el turismo y la música pop influyó de manera determinante en el gusto de los jóvenes, y muchos de los grandes éxitos del tebeo clásico pasaron de moda de forma acelerada. A ello no fueron ajenas las nuevas normas censoras, que sin abandonar su vigilancia eclesial del sexto mandamiento y los temas religiosos o políticos, aterrizó en la lucha contra la violencia explícita, haciendo que las aventuras de los aguerridos héroes de décadas anteriores derivaran hacia la chanza y el chascarrillo perdiendo gran parte de su interés (los guiones de Víctor Mora de aquellos años son clara muestra de esto). 

Si para la aventura clásica la llegada de la década prodigiosa fue un mazazo, para el tebeo femenino, en cierto modo, significó un cambio menos traumático (al fin y al cabo, el tebeo para chicas siempre fue de lo más respetuoso con la norma). Sin desaparecer los cuadernos románticos, las historietas de hadas y princesas fueron paulatinamente sustituidas por narraciones formalmente menos fantásticas, aunque el mundo que retrataban no era menos ficticio.

Entre las novedades para chicas destacaron algunas series aventureras, algo impensable anteriormente. El sello barcelonés Ibero Mundial de Ediciones publicó una colección titulada Heroínas en la que presentó a dos protagonistas que no se dedicaban a buscar el amor de su vida, sino que vivían aventuras como los héroes masculinos. Una de ellas, Lillian, era azafata aérea, oficio de los limitados a la mujer, sí, pero con un prestigio y una libertad muy alejados de las vidas de las modosas modistillas y costureras o princesitas de los cuentos de hadas tradicionales. La otra, nuestra protagonista de esta entrada, era periodista, y no una periodista cualquiera, sino una activa y valiente investigadora que perseguía la noticia sin importarle los riesgos.

La firma del autor de las historias, "Roy Mark", era un seudónimo del veterano guionista Ricardo Acedo. El dibujo corrió a cargo de una de las grandes dibujantes españolas, Carmen Barbará. 

La colección alcanzó los 484 números, con una aventura completa de diez páginas en cada uno. Se publicó además otra colección Mary Noticias Extra, en formato vertical, de la que aparecieron 40 números. El éxito de la fórmula fue evidente, y aunque dirigidos oficialmente a las niñas, no eran pocos los lectores masculinos.

En 2010 Glénat publicó un tomo con los catorce primeros números de Mary "noticias", pero no continuó con la colección. En esta entrada reproduzco el episodio inicial y el que llevó el número 79, creo que para hacerse una idea basta por ahora. 

Los ejemplares empleados, como siempre, no están en demasiado buenas condiciones. Hago lo que puedo, pero estos tebeos son fruto de búsquedas en rastrillos y chiringuitos, y suelen estar muy manoseados. He retocado bastantes páginas del primer número, no todas, aclarando los márgenes o inventándomelos en algún caso cuando estaban demasiado estropeados, y he limpiado lo mejor que he podido los chorretones de café de la portada del número 79 (quiero creer que era café, o tal vez chocolate), pero no he podido hacer lo mismo con la segunda página, donde resultan muy visibles.