Historietas en la prensa en España
Cazando millonarios
Una serie de Sento para el suplemento de El Independiente
Vicente Llobell es uno de los más importantes autores de nuestra historieta.
Soy poco proclive a declaraciones tan tajantes como la del párrafo anterior, y reconozco que no soy el más autorizado para hacerlas, ya que en cuanto al arte del dibujo y la narración con imágenes sólo soy un... espectador, podríamos decir, ya que a la hora de dibujar tengo dos manos izquierdas y no soy zurdo, y cuando de joven intenté escribir alguna vez descubrí que lo que yo tenía que decir ya lo habían dicho otros antes y mucho mejor, con lo que renuncié a volver a escribir el Quijote, Sherlock Holmes o Fu Man-chú y me dediqué a disfrutar de lo que otros sabían hacer.
Una vez dicho esto, insisto en mi arrogancia de declarar que, en mi opinión, por supuesto, en cualquier lista de los mejores autores de historieta españoles sería una falta inexcusable olvidar a Sento. Etiquetado desde muy pronto como componente de la que se llamó nueva historieta valenciana y adscrito por la crítica en la "línea clara", entonces estandarte de uno de los dos bandos en lucha en el mundo historietil patrio, Sento es mucho más que eso, es un narrador vibrante y apasionado, un dibujante personal y con carácter que ha mantenido en su trabajo una calidad estética y narrativa que le sitúa en primera línea del cómic nacional.
Presentada con el texto que se acompaña a la derecha, la historia que se ofrece hoy en el blog se publicó originalmente en El Independiente Jóvenes, suplemento de historietas y artículos para la juventud del diario El Independiente, donde apareció durante once semanas, entre los números 8 (del 26 de noviembre de 1989) y 19 (del 11 de febrero de 1990), con tres páginas en cada número. Posteriormente se reimprimió como número 21 de la colección Misión Imposible del sello Complot, cuya portada he adaptado y retocado inmisericordemente para encabezar esta entrada. En la despedida de la historieta se dice que Sento estaba trabajando en una serie de la que este relato sería el primer episodio. No tengo noticia de que la historia del cartero audaz haya tenido continuación, quizá alguien pueda confirmarlo. El personaje protagonista, según se afirma en la última viñeta, está "influido fisiognómicamente por el actor Fernando Fernán-Gómez". No estoy muy seguro de lo que significa exactamente esa declaración, ya que si la fisiognomía es el estudio del carácter a través del aspecto físico y, sobre todo, a través de la fisonomía del individuo, como consta en el DRAE, lo que se está diciendo es que el carácter del protagonista de la historieta está influido por el del actor, reflejado en un estudio fisiognómico del mismo, lo que me parece muy audaz.
Espero que no se me tome en cuenta esta picajosidad, después de una vida de corrector tipográfico me ha quedado el insoportable defecto de buscar (¡y encontrar!) defectos y errores en todo lo que oigo y leo. Con tal motivo, he corregido algunas erratillas en las viñetas de este cómic. Tras la historieta reproduzco las viñetas tal como se publicaron originalmente para que se advierta que se trata de pequeños errores sin mayor importancia, que no afectan a la narración, con lo que mi intervención no es demasiado grave.
Pues sin más, aquí está la historia del cartero audaz tal como se publicó en el suplemento periodístico.
Viñetas originales que se han corregido en la entrada. Destacados en rojo los errores advertidos. |
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